«La resolución 1080p es importante para los juegos porque influye directamente en la calidad de imagen y el rendimiento»
California │Por Ángel Ramírez│Escritor de LAGLvL
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a resolución 1080p es una de las más populares y utilizadas en el mundo de los videojuegos. Se refiere al número de píxeles que se muestran en la pantalla, tanto en horizontal como en vertical. En este caso, 1080p significa que hay 1.920 píxeles en horizontal y 1.080 píxeles en vertical, lo que da un total de 2.073.600 píxeles.
La resolución 1080p es importante para los juegos porque influye directamente en la calidad de imagen y el rendimiento. A mayor resolución, mayor nitidez y detalle, pero también mayor exigencia para la tarjeta gráfica, que tiene que procesar más píxeles por segundo. Por eso, elegir una tarjeta gráfica adecuada para la resolución que queremos jugar es clave para disfrutar de una buena experiencia.
Por su parte, Nvidia ha recogido los datos publicados por parte de Steam, en donde cada día hay 32 millones de usuarios conectados en la mayor plataforma de videojuegos. Esto supone que 25 millones de usuarios juegan en 1080p o resoluciones inferiores a esta. Tan solo 4 millones de usuarios juegan en resolución 1440p y 880.000 usuarios lo hacen en 4K. Dicho datos hacen referencia a abril 2023.
¿Qué tarjetas gráficas de NVIDIA son las más adecuadas para jugar en 1080p?
NVIDIA es una de las marcas líderes en el mercado de las tarjetas gráficas, y ofrece una amplia variedad de modelos para diferentes necesidades y presupuestos. Para jugar en 1080p, podemos clasificar sus tarjetas gráficas en tres niveles según su rendimiento y precio:
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Nivel mínimo: son las tarjetas gráficas más básicas y económicas de NVIDIA, pero que aún así pueden ofrecer una buena experiencia en 1080p con calidades medias o altas en la mayoría de los juegos actuales. Algunos ejemplos son la GTX 1650, la GTX 1660 o la RTX 2060. Estas tarjetas suelen tener entre 4 GB y 6 GB de memoria VRAM, que es suficiente para esta resolución.
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Nivel medio: son las tarjetas gráficas que ofrecen un equilibrio entre calidad y precio, y que permiten jugar en 1080p con calidades altas o máximas en casi todos los juegos actuales. Algunos ejemplos son la RTX 3060, la RTX 3060 Ti o la RTX 3070. Estas tarjetas suelen tener entre 6 GB y 8 GB de memoria VRAM, que es lo recomendable para esta resolución.
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Nivel máximo: son las tarjetas gráficas más potentes y caras de NVIDIA, y que garantizan jugar en resolución 1080p con calidades máximas y altas tasas de refresco en todos los juegos actuales. Algunos ejemplos son la RTX 3070 Ti, la RTX 3080 o la RTX 3090. Estas tarjetas suelen tener entre 8 GB y 24 GB de memoria VRAM, que es más de lo necesario para esta resolución.
¿Qué otras características hay que tener en cuenta al elegir una tarjeta gráfica de NVIDIA para jugar en 1080p?
Además del rendimiento y el precio, hay otras características que hay que tener en cuenta al elegir una tarjeta gráfica de NVIDIA para jugar en resolución 1080p:
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El trazado de rayos: es una tecnología que simula el comportamiento real de la luz y las sombras, creando efectos visuales más realistas y espectaculares. Las tarjetas gráficas de NVIDIA con arquitectura Turing (serie RTX 20) o Ampere (serie RTX 30) son compatibles con el trazado de rayos, pero su uso implica una pérdida de rendimiento considerable. Por eso, es recomendable contar con el DLSS (Deep Learning Super Sampling), una tecnología que usa inteligencia artificial para mejorar la calidad de imagen sin sacrificar el rendimiento.
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El consumo y la temperatura: son dos factores que afectan al funcionamiento y la durabilidad de la tarjeta gráfica. A mayor consumo y temperatura, mayor ruido y desgaste. Por eso, es importante elegir una tarjeta gráfica con un buen sistema de refrigeración y una fuente de alimentación adecuada. Las tarjetas gráficas de NVIDIA con arquitectura Ampere (serie RTX 30) suelen consumir menos y generar menos calor que las de arquitectura Turing (serie RTX 20).
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El tamaño y la compatibilidad: son dos aspectos que hay que tener en cuenta a la hora de instalar la tarjeta gráfica en el ordenador. Hay que asegurarse de que el tamaño de la tarjeta gráfica cabe en el espacio disponible dentro del gabinete o caja del PC, y que no hay ningún obstáculo que impida su correcta ventilación. También hay que comprobar que la placa base tiene un puerto PCIe x16 libre y compatible con la versión de PCIe de la tarjeta gráfica.
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